Guía para la gestión de gastos y viajes de trabajo
Optimiza tus viajes de negocios, agiliza los procesos y haz que tu organización sea más eficiente con esta guía completa.
Un viaje de trabajo productivo puede significar para la empresa nuevos conocimientos, mejores relaciones y más. Sin embargo, aunque estos beneficios pueden no tener precio, todo viaje de negocios tiene unos costes asociados. Por suerte, con un poco de planificación, organización y comunicación clara, puedes optimizar el proceso de gastos de viaje de tu empresa para ahorrar tiempo y dinero.
Los gastos de viajes de trabajo incluyen la mayoría de los costes en los que se incurre durante un viaje de negocios. Más concretamente, los costes de los productos y servicios necesarios para alcanzar los objetivos del viaje. Como norma general, las personas que viajan por trabajo pueden solicitar el reembolso de los gastos relacionados con sus necesidades básicas o con todo aquello que les permite hacer su trabajo mientras están fuera. Estos gastos pueden tener implicaciones fiscales, así que es fundamental que todo el personal de tu empresa entienda qué puede ser objeto de reembolso.
Los gastos de viajes de trabajo más comunes son los siguientes:
Si bien el abanico de gastos por los que se puede pedir un reembolso es amplio, también hay límites. Los gastos de viajes de trabajo no suelen cubrir cosas como desplazamientos a una oficina local, ropa o costes de ocio personal durante un viaje de negocios.
La gestión de viajes y gastos es el proceso por el que se establecen las políticas de viaje, y se garantiza que el personal haga el seguimiento necesario de los gastos mientras viaja y presente los informes correctamente a su regreso. Es importante gestionar bien los viajes y los gastos para dar claridad al personal, ahorrar en viajes de empresa y llevar una contabilidad precisa.
En las empresas pequeñas, estas tareas pueden corresponder al equipo Legal, al de Recursos Humanos o a los gestores de la oficina, o pueden externalizarse a una empresa de gestión de viajes.
En cambio, en las empresas más grandes, puede que haya una persona encargada de la gestión de viajes corporativos que sea la responsable de la planificación, el establecimiento y el cumplimiento de las políticas, y la gestión de presupuestos y gastos.
Independientemente del tamaño de la empresa, las personas que viajan también desempeñan un papel importante. Son responsables de asegurarse de comprender y seguir la política de viaje, mantener registros de sus gastos y solicitar los reembolsos que corresponda.
El proceso de gestión de viajes y gastos a menudo requiere el uso de una solución de gestión.
Toda empresa debería tener una política de viaje y gastos que aborde la gestión de los gastos, de forma que el personal entienda cómo solicitar reembolsos, qué gastos se pueden hacer y cómo funciona el proceso de reembolso.
Los gastos y los viajes de empresa pueden gestionarse de varias formas, cada una de las cuales tiene sus ventajas e inconvenientes:
La gestión de viajes y gastos es particularmente importante para las empresas, ya que aborda las típicas dificultades derivadas de la planificación de viajes de negocios:
Las plataformas de viajes de negocios son soluciones de software integrales que permiten reservar las diferentes partes de un viaje. Ayudan a agilizar y gestionar los diferentes aspectos de los viajes de empresa, incluida la gestión de gastos.
Estas son las principales características y ventajas que pueden ofrecer las plataformas de viajes de negocios:
El uso de una solución de este tipo puede ser de gran ayuda tanto para las personas que viajan como para el equipo de Finanzas o de Recursos Humanos, ya que algunas tareas están automatizadas.
La forma óptima de hacer un seguimiento de los gastos de viajes de negocios y solicitar reembolsos variará según las preferencias de las personas que viajan y de la política de viaje. Estos son los cuatro pasos principales de un proceso de gestión de viajes y gastos:
Este proceso comienza cuando un empleado realiza una solicitud de viaje, generalmente sujeta a la aprobación de su superior. Esta persona podrá aprobarla, rechazarla o pedir más información. En esta fase, si tu empresa utiliza una solución de gestión de viajes y gastos con una política de viaje integrada, se señalará cualquier infracción de la política.
Una vez aprobada la solicitud, algunas partes del viaje se pueden reservar con antelación, como el hotel y los billetes de avión. Otros gastos, como las comidas o el transporte, se harán durante el viaje. Estos se pueden pagar con una tarjeta de empresa o se le puede pedir al empleado que los pague con la suya y que luego solicite un reembolso.
En este paso, las personas que viajan por trabajo tienen que presentar los recibos de todos sus gastos. Para que todo salga bien, la comunicación de gastos debe basarse en:
El reembolso es la etapa final del proceso de gestión de viajes y gastos. Dependiendo de lo que prevea tu política de reembolso de gastos, el personal puede recibir el reembolso directamente en su nómina o mediante transferencia bancaria. Pedir la opinión de los empleados también es parte del proceso y es importante hacerlo al final de cada viaje para entender cómo mejorar.
En general, las personas que viajan por trabajo y las que gestionan los viajes de este tipo comparten el mismo objetivo: lograr que el viaje sea lo más productivo posible minimizando el gasto.
La clave para establecer límites de gasto es buscar el equilibrio entre restricciones y libertad. Cada persona tiene diferentes rutinas, dietas, necesidades y preferencias. Algunas agradecen tener un gimnasio en el hotel, mientras que otras priorizan la ubicación. Hay quien necesita un desayuno abundante y quien prefiere hacer varias comidas pequeñas a lo largo del día. La flexibilidad permite a los viajeros de negocios tomar decisiones que mejoren su productividad durante el viaje, lo que beneficia a todas las partes.
Estas son algunas sugerencias útiles para definir condiciones aplicables a categorías de gastos clave y lograr así el equilibrio adecuado:
Hay muchos consejos y trucos para controlar el gasto en viajes. Estas son algunas maneras de comenzar a reducir el gasto:
La mejor estrategia de gestión de gastos de viajes de empresa es la que se adapta a ti, a tu organización y a tu equipo. Invita al personal a reflexionar e intercambiar feedback con regularidad para crear un proceso de gestión de gastos que funcione para tu empresa y sus especificidades.
Estas son algunas buenas prácticas aplicables a todas las organizaciones:
Hay muchas opciones de software de viajes y gastos para agilizar el proceso de solicitar reembolsos y tener todo organizado. También puedes pedir a los viajeros de negocios que hagan una foto de los recibos y las facturas de inmediato, y que las suban a carpetas compartidas sobre la marcha. Esto evitará que pierdan recibos y les ahorrará tiempo cuando vayan a solicitar el reembolso.
Es fácil dejar que las tareas administrativas se acumulen, especialmente al volver de un ajetreado viaje de negocios. Asegúrate de que el personal tiene plazos claros para enviar los informes de gastos y solicitar reembolsos.
Incluso dentro de un mismo país, los costes pueden ser radicalmente diferentes. Establece presupuestos realistas para viajes de negocios y plantéate adaptar los límites de gasto a la ubicación. También deberías revisar la política de viaje al menos una vez al año para comprobar que el presupuesto se ajusta a la inflación y las fluctuaciones locales en destinos de viaje frecuentes.
Intenta que la política de viaje sea fácil de entender para todo el mundo. A la hora de redactar la política, usa un lenguaje sencillo y asegúrate de que no haya ambigüedades acerca de los gastos reembolsables. Una vez creada la política, es importante contar con un plan de comunicación para que todo el mundo la conozca y enviar recordatorios cada cierto tiempo para que tengan la información fresca.
Las tareas administrativas como la gestión de viajes y gastos pueden quedar relegadas a un segundo plano cuando el trabajo aumenta. Pero un poco de planificación, organización y comunicación ayuda mucho. Una estrategia clara no solo supone mayor eficiencia administrativa y financiera, sino que también reduce la confusión y la ansiedad. Así, el equipo puede centrarse en lo que importa: lograr los objetivos de su viaje de negocios.
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